Paso 1: Preparar la salsa boloñesa Comienza preparando la base de la lasaña: la salsa boloñesa. En una sartén grande o una cacerola profunda, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio. Añade la cebolla, las zanahorias y el apio, y sofríe durante unos 8-10 minutos, hasta que estén tiernos y ligeramente dorados. Luego, agrega el ajo y cocina por 1 minuto más, asegurándote de que no se queme. Añade la carne molida de res y la de cerdo (si decides usarla), y cocina hasta que se dore bien, desmenuzando la carne con una cuchara de madera mientras se cocina. A continuación, incorpora la pasta de tomate, el tomate triturado, el orégano, la albahaca, sal y pimienta. Mezcla todo bien y añade el caldo de res. Reduce el fuego y deja que la salsa hierva a fuego lento durante al menos 30-40 minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que los sabores se mezclen y la salsa espese. Cuanto más tiempo la dejes cocer a fuego lento, mejor será el sabor.

Paso 2: Preparar la salsa bechamel Mientras la boloñesa se cocina a fuego lento, es momento de hacer la salsa bechamel. En una cacerola mediana, derrite la mantequilla a fuego medio. Una vez derretida, añade la harina de trigo y cocina por 2-3 minutos, removiendo constantemente con una cuchara de madera o un batidor para formar un roux (una pasta espesa). A continuación, comienza a añadir la leche poco a poco, sin dejar de batir, para evitar que se formen grumos. Cocina a fuego medio hasta que la mezcla comience a espesar, lo cual tomará unos 8-10 minutos. Añade una pizca de nuez moscada, sal y pimienta al gusto. La salsa debe quedar cremosa y suave. Si está demasiado espesa, puedes añadir un poco más de leche. Una vez lista, retírala del fuego y reserva.

Paso 3: Cocinar la pasta de lasaña Si estás utilizando láminas de lasaña que requieren cocción previa, llena una olla grande con agua, agrégale sal y lleva a ebullición. Cocina las láminas de lasaña según las instrucciones del paquete, asegurándote de que queden al dente. Una vez cocidas, colócalas en una bandeja con un poco de aceite de oliva para que no se peguen entre sí. Si estás utilizando láminas precocidas, omite este paso.

Paso 4: Armar la lasaña Ahora que tienes la salsa boloñesa, la salsa bechamel y las láminas de lasaña listas, es momento de armar la lasaña. Precalienta el horno a 180°C. En una fuente para horno (de aproximadamente 20×30 cm), comienza colocando una capa delgada de salsa boloñesa en el fondo. A continuación, coloca una capa de láminas de lasaña encima, asegurándote de que cubran toda la superficie. Luego, extiende una capa de salsa bechamel sobre la pasta y espolvorea un poco de queso mozzarella rallado. Repite este proceso (boloñesa, pasta, bechamel, queso) hasta que llegues a la parte superior de la fuente, terminando con una capa de salsa bechamel y una generosa cantidad de queso mozzarella y parmesano rallado para gratinar.

Paso 5: Hornear la lasaña Una vez armada la lasaña, cúbrela con papel aluminio (para evitar que se queme la parte superior) y hornéala durante 25 minutos. Después, retira el papel aluminio y hornea durante 15-20 minutos más, o hasta que la parte superior esté dorada y burbujeante. Una vez que la lasaña esté lista, retírala del horno y deja reposar durante 10 minutos antes de cortarla. Esto ayudará a que las capas se asienten y sea más fácil servirla.